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Lollapalooza Chile 2015, la fiesta de la diversidad

Si bien es cierto, este es el Lollapalooza con la menor cantidad de público desde su primera edición el 2011 – aproximadamente 60.000 personas por día – no deja de ser el evento masivo que más gente mueve en el país, y esto no es simplemente por coincidencia o moda, ya en su quinta versión, cualquier suspicacia o especulación deben acabarse, no más.

Foto y texto por Cristhian Plaza

Muchos, y me incluyo, pensamos que en el papel al menos, este festival venía con el cartel más bajo, menos atractivo, pero eso simplemente me pasa por no mirar más allá de mi nariz y dármela de crítico y especialista en música… wait, si lo soy, pero eso no quita que cometa errores, errores básicos y que no sólo fui yo quien los cometió, entre mis colegas tanto de esta revista como los de otros medios, era común destacar lo poco atractivo, pero nadie se dio cuenta, menos yo hasta hoy, de que, el círculo en el cual estaba moviéndome estaba reclamando no porque el Lollapalooza fuera bajo realmente, si no, porque no tenía un nombre de “peso” o un nombre que todos deseamos, pero no cualquier nombre estábamos esperando, no, necesitábamos un nombre rock, porque sentimos que el Lollapalooza es guitarras, bajos y baterías, pero perdimos el origen, el génesis del festival. La diversidad.

Carlos Lavín Subercaseaux, economista nacional, dice que el error más común en los negocios es creer que tenemos a nuestro alrededor lo que realmente sucede, que es un buen termómetro, pero no, para eso hay número, hay que dejar de creer y ponerse a observar, dejar de sorprenderse y entender, entender que este festival es diversidad, es Hip-Hop, es Kid-lapalooza, Moscas Muertas y Dinosaurios Rockeros, es Música Electrónica, es House, es Dubstep, esPpop, es Funk, es Ska y también está el Rock, no es lo único, es algo más, y esta vez estuvo equilibrado, siempre había algo que ver para quien quisiera ver, siempre había algo que hacer, durante este sábado y domingo nadie se podía aburrir y floreció en su esplendor el espíritu Lollapalooza, este fin de semana se vivió el espíritu Lolla.

El año 2014 Lollapalooza Chile fue catalogado el mejor festival del mundo, y eso no fue coincidencia, eso fue trabajo, fue organización, fue dar lo que queremos recibir, nadie hizo fila, nadie espero por la comida, nadie tuvo retraso en el show, todo estuvo redondo, todo estuvo ok, perfecto.

Podríamos dedicarnos a escribir que hubo momentos altos, y que los hubo, o sea, el show de Jack White debe ser el mejor show que ha pasado por el festival y si no es el mejor, compite codo a codo con el de The Black Keys. Hubo un montón de bandas y artistas que triunfaron, por no decir todos, porque cada uno tenía el público que lo quería ir a ver y con ellos disfrutó, no por algo se llenaba el movistar, la cúpula, todos los escenarios, no todos los 60.000 fueron a ver a Robert Plant, el Movistar estaba colmado de raperos festejando con Cypress Hill, donde fueras lo estaban pasando bien, lo pasabas bien.

Hoy y un Lolla que parecía débil en el papel resultó ser todo lo contrario, un rotundo éxito, un público feliz y un festival impresionante, imperdible, hoy Lollapalooza recuperó su origen, y no es el rock, es el público, es la tolerancia, la diversidad, Lolla hoy tuvo un público y show, hoy habían favoritos, sí, pero como en una carreta, no habían rotundos ganadores, no hasta que terminó y nos dimos cuenta de que los ganadores habíamos sido nosotros.

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